¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE LA ARTROSIS CERVICAL?
La cervicoartrosis en sus etapas iniciales puede no producir síntomas, mientras que aparecen al aumentar su nivel de gravedad por el creciente desgaste del cartílago.
Entre los principales síntomas de la artrosis cervical encontramos los siguientes:
- Dolor de cabeza
- Mareos
- Dolor de cuello
- Rigidez temporal
- Dolor en hombros y brazos
- Vértigos
- Hormigueo
- Fallos musculares
- Disminución de fuerza
- Fatiga
Estos síntomas de la artrosis cervical van a surgir de manera progresiva a medida que se aumenta la gravedad y el tiempo que llevamos batallando con la enfermedad.
De todas formas, es crucial que el diagnóstico lo realice un profesional o especialista en el área para conseguir frenar las dolencias y elegir el mejor tratamiento de manera individualizada, disminuyendo así los síntomas de la artrosis cervical.
PRINCIPALES EJERCICIOS PARA LOS SÍNTOMAS DE LA ARTROSIS CERVICAL QUE AYUDAN A DISMINUIR EL DOLOR
Ejercicios prohibidos para la artrosis cervical
Vamos a presentar una serie de ejercicios o movimientos a evitar para mejorar los síntomas de la artrosis cervical y conseguir eliminar las dolencias.
- Evitar el esfuerzo excesivo en articulaciones y músculos
- No mantener una posición estática durante mucho tiempo
- Utilizar de forma correcta la espalda, brazos y piernas
- No agacharse de una forma violenta
- Evadir movimientos bruscos que puedan provocar tirones o lesiones repentinas
5 ejercicios para la artrosis cervical
El ejercicio físico en personas que presentan síntomas de la artrosis cervical es fructífero y muy recomendable, pues ayuda a destensar la zona de dolencia, alivia las dolencias y previene daños articulares.
Algunas recomendaciones previas a la realización de cualquier ejercicio son mantener buena postura o estirar antes de hacer esfuerzo físico.
A continuación, os detallamos una tabla de ejercicios para aliviar los síntomas de la artrosis cervical, con la cual obtendremos una disminución de los dolores muy notable si se realiza de forma diaria.
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RELAJACIÓN DIARIA
Tómate tu tiempo de descanso y siéntate en un taburete o silla para llevar un brazo detrás de la espalda mientras que con el otro sujetamos la cabeza hacia el lado contrario, empujando de una forma suave y manteniendo esta posición durante unos segundos.
Repetimos con los brazos cambiados.
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DESBLOQUEAR OMOPLATOS
Nos colocamos de pie con las piernas ligeramente abiertas a la anchura de las caderas.
Con los dedos entrelazados, estiramos los brazos al mismo tiempo y llevamos las palmas de las manos al frente hasta notar que movemos las escápulas y se curva la zona de las vértebras dorsales.
Al igual que el anterior ejercicio, aguantamos unos segundos en esta posición y la repetimos mínimo 3 veces.
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LIBERAR LA RIGIDEZ DEL CUELLO
Con una toalla tras el cuello para tener un apoyo y proteger las cervicales, agarramos los extremos con ambas manos y movemos la cabeza en dirección al techo y hacia atrás.
Aguantamos unos 6 segundos y volvemos a la posición inicial, repitiendo el ejercicio una media de 5 veces.
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RELAJAR HOMBROS
Con las piernas abiertas a la anchura de la cadera y las rodillas medianamente flexionadas, unimos las manos por detrás de la espalda y levantamos los brazos hasta lo máximo posible.
Realizamos este ejercicio unas 4-5 veces, aguantando unos 10 segundos cada repetición.
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REDUCIR MOLESTIAS
Cruzamos los dedos detrás de la cabeza hasta que ambos codos queden a la misma altura. A continuación, llevamos la barbilla hacia el pecho acompañando el movimiento con las manos y aguantando 10 minutos en esa posición.
TRATAMIENTO PARA LOS SÍNTOMAS DE LA ARTROSIS CERVICAL: DI ADIÓS A TU DOLOR
Por último, os vamos a presentar un revolucionario tratamiento que ha sido desarrollado por Peter Wehling y Julio Reinecke, en colaboración con el profesor Chris Evans y el profesor Paul Robbins, que tan buenos resultados ha conseguido desde su incorporación al mundo sanitario en el año 2003.
Orthokine ha tratado a más de 100.000 pacientes desde su lanzamiento, los cuales han notado mejoría en una media de 6 semanas tras el comienzo con la terapia autóloga.
Se realiza una única extracción de sangre del paciente afectado, utilizando su Suero Autólogo Condicionado que contiene numerosos factores de crecimiento y proteínas anti-infamatorias que mejoran los síntomas de la artrosis cervical.
Este tratamiento no solo ayuda a desinflamar la zona dañada, sino que, a diferencia de otras terapias, contribuye a la regeneración del cartílago por ser una terapia condroprotectora, además de regenerativa y analgésica.
